Grand Rapids, MI – En una poderosa muestra de solidaridad, los manifestantes pro-Palestina se reunieron en las dos ciudades más grandes del oeste de Michigan la semana pasada para condenar el apoyo de la vicepresidenta Kamala Harris al genocidio estadounidense/israelí.

Organizadas por Palestine Solidarity Grand Rapids (PSGR), Kalamazoo Nonviolent Opponents of War (KNOW), varias organizaciones estudiantiles y otros aliados locales, estas manifestaciones destacaron la demanda de los residentes de Michigan de poner fin a la ayuda estadounidense a Israel y redirigir los fondos hacia las necesidades de la clase obrera estadounidense.

El sábado 26 de octubre, más de 30 personas se reunieron frente al Wings Event Center de Kalamazoo, sosteniendo carteles con mensajes como “Embargo de armas a Israel” y “Derechos humanos sobre la fuerza militar”. Marissa Wagner, representante de KNOW y de Estudiantes por la Justicia en Palestina en la Universidad de West Michigan, subrayó la urgencia de estas protestas.

“Estamos exigiendo un embargo de armas a Israel”, declaró Wagner. “Kamala Harris corre un grave riesgo de perder la elección si no toma medidas reales para apoyar a nuestra comunidad palestina. La administración Biden/Harris dice que apoya un alto al fuego, pero continúa financiando a Israel mientras ataca a sus vecinos. Así que estamos aquí para dejar claro a la campaña de Harris que no son bienvenidos a menos que empiecen a escuchar a sus electores.”

El viernes 18 de octubre, más de 40 manifestantes se reunieron en el Riverside Park de Grand Rapids mientras Harris hacía campaña en la ciudad. “Nuestros impuestos están financiando el asesinato masivo de palestinos”, dijo Wren Burns, residente del oeste de Michigan. “La administración Biden-Harris debe rendir cuentas por estas atrocidades, especialmente mientras los trabajadores de Michigan luchan por satisfacer sus necesidades básicas”.

Los manifestantes repartieron folletos a los asistentes al evento, educándolos sobre la participación de Estados Unidos en acciones militares en el extranjero y destacando el propio papel de Michigan a través de iniciativas como el Michigan Israel Business Accelerator, que fortalece los lazos estatales con los contratistas militares y los fabricantes de armas.

La manifestación en Grand Rapids también llamó la atención sobre el aumento de la retórica anti-inmigrante y xenofóbica dentro del Partido Demócrata.

“La clase trabajadora de Michigan exige el fin de estas atrocidades”, dijo Emerson Wolfe, presidente de PSGR. “Poner fin a la ayuda estadounidense a Israel es política popular”.

Estas protestas están ocurriendo en medio de una alarmante tendencia de represión política contra las voces anti-guerra, incluyendo las recientes acciones de la fiscal general de Michigan, Dana Nessel, quien presentó cargos contra 11 manifestantes antí-genocidio del campamento estudiantil en la Universidad de Michigan.

“La adopción por parte del partido del nacionalismo de derecha y las tácticas de represión están alejando a más votantes cada día”, dijo Wolfe. “La dirección actual de los demócratas está traicionando los valores de su propia base”.

Las manifestaciones en el oeste de Michigan son una clara advertencia de que el apoyo del Partido Demócrata a la ocupación de Israel y su adopción del militarismo corporativo son incompatibles con los valores de muchos de sus votantes en Michigan. A medida que se acercan las elecciones de 2024, los residentes de Michigan exigen un cambio que refleje las necesidades y valores de las comunidades trabajadoras en el estado. Para los votantes de Michigan, esto significa poner fin a la ayuda estadounidense a Israel, y priorizar los derechos humanos sobre los intereses políticos y corporativos.

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