Chicago, IL – Por el factor del viento parecía dos grados bajo cero en Chicago cuándo los trabajadores empezaron su piqueteo el 6 de diciembre. Tras 45 minutos de marchar en las nubes de nieve, supieron que habían enviado un mensaje fuerte. “Estamos luchando para salvar a nuestros trabajos” gritó Shirley McIntosh, levantando la voz para ser escuchada en el viento.

McIntosh, una delegada de base del local 73 del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios (SEIU) es una de los 140 empleados que trabajan en el departamento de cuentas de la Universidad de Illinois, Centro Médico en Chicago. Si los jefes de la gerencia de la universidad logran lo que desean, a todos estos empleos los van a sustituir con trabajadores no sindicalizados que carecerán de beneficios del servicio civil.

Los integrantes del local 73, incluyendo enfermeras que pertenecen a la Asociación de Enfermeras de Illinois, mas apoyadores de la organización Empleos y Justicia (Jobs with Justice), constituyeron los 60 luchadores congelados que marcharon. Los gritos incluían, “Jey, Jey, Jo, Jo, Abajo la Privatización”. Tanto frió y nieve hubo que Rodney Telomen, co-presidente de la Asociación de Enfermeras, tuvo hielo adhiriendo a sus barbas y bigotes.

¿Contratos o Corrupción?

Durante varios años, las enfermeras y otros trabajadores sindicalizados en la Universidad de Illinois han tenido que luchar en contra de la privatización por medio de contratos con compañías particulares. Este año, la gerencia ha inventado un ángulo nuevo.

La “agencia de afuera” que se ha creado para apoderarse de este trabajo en realidad no es una cosa de afuera. Llamado “Wolcott, Wood y Taylor”, o WWT (por las calles que rodean a los planteles de las clínicas y hospitales de la universidad), esta “compañía” fue inventada por la Junta de Síndicos de la misma universidad. Por medio de un préstamo de $5.5 millones, ellos le proporcionaron el dinero para comenzar. Luego le proporcionaron a WWT espacio para sus oficinas en las meras planteles de la universidad.

Los empleados que van a perder sus empleos son afro-americanos y latinos, incluyendo muchas mujeres, que han prestado muchos años de servicio a la universidad. Pero los patrones del WWT son los altos funcionarios de la universidad, quienes mantendrán sus altos salarios bajo el nuevo arreglo. Lo dijo Rodney Telomen “A Chip Rice, vice-canciller encargado del Centro Médico de la Universidad de Illinois en Chicago, le pagan $300,000 cada año. Este salario sin lugar a dudas se encontrará aumentado si se convierte en un director de WWT”. Universidad de Illinois en Chicago ¿Les Importan mas las Ganacias que la Gente?

¿Porque está sucediendo esto ahora mismo? Lo sabe Sirlena Perry. Ella es vice delegada principal del local 73 en la universidad, y participaba en la marcha. “El verdadero problema consiste de las organizaciones de mantenimiento de salud (HMO) y las compañías de aseguranzas. ¡Pero el pueblo se despierta!” Es cada vez mas obvio para la gente que las grandes corporaciones invertidos en la salud están haciendo ganancias enormes. Son tan ricos que pueden obligar a los hospitales públicos hacer lo que les da la gana. Las corporaciones cortan las ganancias de los hospitales, y luego los hospitales pasan los costos y la presión a sus empleados y a los pacientes. Los trabajadores se están uniendo con los ancianos para exigir que la gente debe ser atendido antes de las ganancias.

Otra delegada del local 73, Glenda Searcy, que también es una lideresa de los empleados amenazados, dijo: “Hemos trabajado muy fuerte y ahora nos amanezan así. Exigimos el respeto y la seguridad en el trabajo”.

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