“¡Cierren la Escuela de las Americas! ¡Cierren la Escuela de las Americas!” sonará en las orejas de los 12,000 manifestantes, estudiantes, activistas religiosas, y también las cajeras, meseras, trabajadores, soldados estadounidenses y latinoamericanos dentro y alrededor de la Escuela de las Americas, en Fort Benning, Colombus, Georgia, el 17-19 de noviembre. En Colombia, los lideres de sindicatos, las organizaciones estudiantiles, las asociaciones de campesinos, y las organizaciones que luchan para los derechos humanos también pensarán y discutirán en lugares secretos, la necesidad de cerrar la Escuela de las Americas.

En los Estados Unidos, activistas van a ser testigos y también van a hacer “desobediencia civil” en Fort Benning, en solidaridad con los pobres y oprimidos de Colombia. Mientras tanto, la gente de Colombia se prepara para el día cuando el ejercito de Colombia y los escuadrones de la muerte, los llamados paramilitares, los que reciben su entrenamiento en esta misma Escuela de las Americas, llegarán para torturar y asesinar la gente en su pueblo o barrio. Esto pasa cada semana, desde que empezó el Plan Colombia. El Plan Colombia del Presidente Clinton y el Vice-Presidente Gore ha aumentado un tipo del terror fascista en algunos partes de Colombia.

Entrenados y dirigidos por el ejercito de Colombia, de lo que mas que 10,000 de sus soldados han recibido su entrenamiento en la Escuela de las Americas, los escuadrones de la muerte paramilitar están en el centro del Plan Colombia hecho por la Casa Blanca / CIA / Pentágono.

La tarea de los paramilitares es atemorizar a la población rural y urbana, hasta que submisión. Cualquiera persona que intenta organizar en su comunidad, escuela, lugar del empleo, o la granja, es un “blanco legitimo” por que supuestamente amenazan la “seguridad nacional”.

Clinton aplastaba los requisitos de derechos humanos para aprobar el Plan Colombia, que vale $1,300,000,000. Aunque el gobierno y ejercito de Colombia solamente logró uno de los siete prerrequisitos de derechos humanos, supuestamente necesario para recibir dinero de los Estados Unidos, Clinton todavía aprobó el dinero. A Clinton y Gore, no les importan los derechos humanos. Tanto Clinton como Gore saben que la guerra en Colombia es una guerra para preservar el dominio económico de las empresas grandes de los Estados Unidos. Al Gore sabe que tiene que defender su propio dominio, y el dominio de sus amigos billonarios / millonarios, sobre el combustible, la plata, los minerales, los guineos, el café, la tecnología y las vías de agua. Mientras el negocio número uno del mundo es el negocio de las armas, el negocio número dos es el de las drogas ilegales, y la clase capitalista que tiene poder en los Estados Unidos maneja ambos mercados. Los dueños ricos de los Estados Unidos no permitirán cualquiera de estos dos mercados salga de su control.

La Escuela de las Americas es la Universidad del Terror Estatal para los ricos. Este año los que protestan por el cierre de la Escuela de las Americas crearán una manifestación más grande y más enérgica que la manifestación del año pasado. El movimiento en contra de la Escuela de las Americas esta creciendo de nuevo debido al Plan Colombia y sus efectos asesinos. Habrán muchos estudiantes que se están organizando en contra de la intervención estadounidense en Colombia. Hay estudiantes que están formando locales de la Red de Acción Colombia (Colombia Action Network) para terminar la guerra en Colombia.

Jackson Potter, un estudiante universitario de cuarto año, dijo, “Estoy en contra de la Escuela de las Americas por que es el lugar donde reciben entrenamiento la mayoría de los que violan los derechos humanos en Colombia-¡y estos mismos violadores de los derechos humanos están invitados para regresar y enseñar clases!

Muchos sindicalistas irán a la protesta en contra de la Escuela este año por que la mitad de los sindicalistas asesinados o desaparecidos en todo el mundo el año pasado eran de Colombia, donde un líder de sindicato es matado cada tres días por los escuadrones de la muerte. El número de los activistas religiosos que buscan paz y justicia sigue creciendo. Esta manifestación va a llevar el movimiento a una nueva etapa en contra de la Escuela de las Americas. La protesta va a alcanzar a la gente en todo el país, y va a dar inspiración a todas las personas que luchan para la justicia en Colombia.

¡Cerremos la Escuela de las Americas!

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